viernes, 12 de octubre de 2012

Las cartas que nunca envié...

:)


Esas cartas que nunca envié...
Prefiero tenerlas en papel,
por si acaso la ocasión lo amerita.
Quisiera saber también
si son las letras la salida de mi alma,
o la prisión de mis latidos;
si escribir libera,
o sólo me ata más contigo.

Aquí se asoma el receptor de mi epístola:
haciendo su aparición,
difícil será hacerle a un lado;
quizá tanto verbo lo atropelle;
quizá todo quede en el pasado...

A quien dirijo mis letras
también dedico mis suspiros:
no tanto a sus besos
sino a la ausencia de ellos,
no tanto a sus manos
sino al recuerdo de lejos,
no tanto a su voz,
sino a la sensación de su silencio.

Y es que mi pecho no es bodega,
harías bien en saberlo;
pero... ¿qué mas da?,
si a ti no te interesa mi embelezo... 
Cada segundo que pasé a tu lado
en mi memoria lo tengo anotado.
Comenzando por el prinicpio:

te recuerdo en aroma,
te recuerdo en mis labios sobre tu mejilla;
te recuerdo en silencio,
porque hablarte a ti yo no puedo...

Finalmente comprendí lo que se siente
mirar tus recuerdos una y otra vez en la mente
y sentir que el momento queda ileso:
que no es un cuento fracturado,
que no se quedó en suspensivo pasado;
¡que todo fue como un amable sueño,
y realmente, hasta ahora,
no he podido despertar, ni quiero!
 A poco menos de un año
tu conversación sigue siendo espontánea,
me sigue sorprendiendo.

Quisiera que hubiera tenido distinto final
aquella noche que haría diferente todo;
¿qué tal un pacto sellado con el mirar?,
¿o una sonrisa que prometiera...
que prometiera que juntos buscaríamos ese final?
Pero pensar en eso es hasta obsoleto:
no pude haber hecho más nada,
no pude ni puedo ahora...

¿Que si quisiera olvidarte?
¡Eso jamás!

Lo único que me hace aferrarme
a tan frenético sueño constante
es esa seguridad inconmovible
de que pertenecemos, aunque distantes,
el uno al otro. Y aquí acaba.

Sólo la fe puede mantener la esperanza
que la razón se niega a sostener,
y que el corazón, pavoroso, no puede entender.
¡Es tan arriesgado este amor que ignoras!...
Precisamente por eso:
porque tú aún no lo sabes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario